Apoye. No Castigue ofrece un conciso folleto sobre el histórico informe 2024 de la Relatora Especial de la ONU, que brinda a las personas defensoras herramientas para promover la descriminalización, la reducción de daños y una política de drogas basada en los derechos humanos.
Singh Kelsall et al. sostienen que el retroceso en la descriminalización en Columbia Británica constituye una forma de violencia biopolítica, una masacre sancionada por el Estado disfrazada de política de salud pública.
La UNODC presenta su perspectiva sobre el papel de las flexibilidades de los tratados para posibilitar la descriminalización como parte de enfoques basados en la salud, identificando reformas y alternativas relacionadas a las medidas punitivas.
IDPC destaca la creación de un mecanismo de revisión independiente y el aumento de las divisiones en torno a la reducción de daños, los derechos humanos y los derechos de los pueblos indígenas.
CSIH-WCA y FHI 360 han elaborado un conjunto de herramientas para ofrecer a programas dirigidos a poblaciones clave de los recursos necesarios para protegerse, fortalecerse y brindar mejores resultados en la vanguardia de lucha contra el VIH.
El Foro instó a la adopción de resoluciones periódicas del Consejo de Derechos Humanos, una más robusta coordinación de la ONU, el funcionamiento de un grupo de expertos y el mantenimiento del financiamiento para la reducción de daños, resaltando como prioridades fundamentales los derechos indígenas, la descriminalización y la inclusión de la sociedad civil.
El equipo de BOOST explica cómo ampliar la reducción de daños liderada por la comunidad es clave para lograr equidad, impacto y avances reales en la respuesta al VIH.
Martín-Lannes et al. ofrecen perspectivas desde Colombia, destacando la importancia de regulaciones específicas para cada contexto y proponiendo recomendaciones que promuevan la equidad social.
Bewley-Taylor et al. consideran útil el GDPI para comparar políticas de drogas internacionales y sugieren mejoras para gestionar mejor la incertidumbre y la diversidad de datos.
ONUSIDA advierte que una crisis financiera global amenaza décadas de avances contra el VIH, a pesar de la resiliencia de las comunidades y la innovación nacional.
La ONUDD vincula el aumento del consumo de drogas, el daño ambiental y los delitos relacionados con drogas con la inestabilidad global, pero no reconoce la necesidad de un cambio de paradigma.