Nueve organizaciones de derechos humanos condenan el impulso de Maldivas para imponer la pena de muerte por tráfico de drogas, advirtiendo que viola el derecho internacional y contraviene las tendencias globales hacia la abolición.
La “guerra contra las drogas” contra la cocaína alimenta la deforestación amazónica, fortalece al crimen organizado y pone en peligro a las comunidades indígenas, lo que evidencia la necesidad de una reforma basada en los derechos.
La sociedad civil insta a la OMS a sostener su liderazgo en reducción de daños, resistir los recortes de financiación y asegurar la participación significativa de las comunidades.
El ataque militar que causó la muerte de 11 personas plantea serias preocupaciones sobre legalidad, proporcionalidad y el uso de la fuerza letal en operaciones antidrogas.
Louise Beale Vincent, una activista muy querida e invaluable, directora ejecutiva de la Unión Nacional de Sobrevivientes y la Unión de Sobrevivientes de Carolina del Norte, será recordada por su legado en la creación de movimientos y su compromiso con el cuidado de la comunidad.
El 60º período de sesiones es una oportunidad para visibilizar el impacto de las políticas de control de drogas en los derechos humanos a nivel mundial, con la pena de muerte, violaciones del derecho internacional humanitario, desapariciones forzadas y debates sobre la detención arbitraria que tendrán lugar.
Ucrania ha aprobado una nueva estrategia nacional de política de drogas, que busca mejorar el acceso a medicamentos controlados, ampliar los programas de reducción de daños y brindar apoyo a las poblaciones marginadas.
El programa busca capacitar a candidatos para participar en procesos de derechos humanos de la ONU y centrar las voces indígenas en temas emergentes como la reforma de la política de drogas.
Contra la criminalización, la invisibilidad y la violencia sistémica, estas iniciativas buscan ampliar la reducción de daños y la reforma de políticas con perspectiva de género, basándose en la experiencia vivida.
Aunque a menudo se presenta como una solución total, la descriminalización es solo una pieza del rompecabezas y su éxito depende de una mejora integral del apoyo social.