ACNUDH exhorta al gobierno de Filipinas a emprender un abordaje transformador que se enfoque en soluciones basadas en los derechos ante los persistentes retos, incluyendo aquellos referidos a la destructiva guerra contra las drogas.
A pesar de las pruebas inequívocas en apoyo de la reducción de daños y de su creciente aceptación, las políticas de "guerra contra las drogas" siguen esquilmando los recursos públicos.
IDPC, HRI, CDPE y el Instituto RIA invocan al Alto Comisionado a recomendar la descriminalización de personas que consumen drogas como un facilitador crítico de la sociedad para acabar con el VIH/SIDA.
HRI, IDPC, CDPE y el Instituto RIA trazan los vínculos entre la reforma de políticas referidas a drogas, participación de la comunidad y la protección de los derechos humanos.
El IDPC presenta una visión general de los puntos de interconexión entre los derechos humanos y la fiscalización de drogas, tal como se consagra en el documento final de la UNGASS, y ofrece recomendaciones para garantizar una mejor coordinación de estos dos ámbitos de la cooperación internacional.
Miembros y aliados del IDPC han participado en la convocatoria de contribuciones de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) con respecto al próximo informe sobre la aplicación del documento final de la UNGASS y los derechos humanos.
El IDPC repasa los éxitos y obstáculos de la participación de la sociedad civil en la UNGASS de 2016 como un estudio de caso para incorporar al próximo informe de la OACDH.
El IDPC insta al Alto Comisionado a promover la reducción de daños y a reiterar su llamamiento a favor de despenalizar el consumo de drogas y poner fin a todas las demás formas de castigo inhumano y desproporcionado.