La guerra contra las drogas ha tenido efectos catastróficos en la salud pública y los derechos humanos, particularmente para poblaciones en situaciones de vulnerabilidad.
Noruega explica su paso por la presidencia del Consejo de Europa y sus esfuerzos para poner los derechos humanos en el centro de las cuestiones de políticas de drogas.
Organizaciones de la sociedad civil urgen al gobierno colombiano a asegurar la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones sobre políticas de drogas.