Condenada a nueve meses de prisión la activista más veterana por la legalización del cannabis en España

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Condenada a nueve meses de prisión la activista más veterana por la legalización del cannabis en España

3 enero 2020

Por Santiago F. Reviejo

Fernanda de la Figuera, la activista más veterana de España por la legalización del cannabis, ha sido condenada por el Juzgado de lo Penal número 5 de Málaga a 9 meses de prisión y una multa de 10.000 euros por el cultivo y distribución de la marihuana de la que se abastecía la asociación de mujeres MaríasxMaría con fines terapéuticos, una pena inferior a la de cuatro años de cárcel que solicitaba para ella el fiscal.

La sentencia, que va a ser recurrida por Fernanda de la Figuera, también conocida como la abuela marihuana, considera probado que esta mujer, de 76 años, es culpable de un delito de tráfico de drogas de "sustancias que no causan grave daño a la salud" por unos hechos que se remontan a 2014, cuando ella presidía MaríasxMaría, inscrita en el Registro de Asociaciones de Andalucía con domicilio social en la finca El Refugio de Alhaurín el Grande, donde se cultivaba la marihuana -181 plantas- que posteriormente se distribuía a los socios de la entidad en un local de Málaga.

Sin embargo, el titular del Juzgado de lo Penal 5, Carlos Peinado Domínguez, estima que en la asociación se desarrollaron "prácticas, acciones y conductas que favorecieron el consumo de la marihuana", porque el número de socios -200- era "muy elevado", no se acreditaba ni controlaba que éstos fueran "consumidores habituales de la droga, adictos o drogadictos" y no se adoptaron medidas de control y vigilancia para garantizar que el cannabis cultivado en la finca de Alhaurín se consumiera sólo dentro del local de la entidad en la capital malagueña, de forma inmediata y "en la dosis mínima".

Además, el juez entiende que no se llevaron a cabo controles exhaustivos de la cantidad de cannabis que cada socio adquiría ni se supervisaba a quién se le suministraba, de manera que tampoco se evitaba que “la droga pudiera llegar a manos de terceras personas desconocidas y ajenas a la asociación”.